Tenemos mala fama, lo sé, somos caros, lo sé, a veces no te cogemos el teléfono, también lo sé, te decimos ahora te llamo y eso nunca ocurre, créeme que también lo sé, pero ¿sabes qué?, nos necesitas.
¿Cúantas veces te ha pasado esto?
El clásico familiar que se cree un manitas, te dice que te va a arreglar el coche… que es una tontería, que eso te lo arreglo yo en un momento…, y al final en el taller te cobran la avería y el “arreglo” de tu cuñado el manitas.
A nosotros, por desgracia, nos pasa con frecuencia. Por eso, vamos a quitarte esas inseguridades y desconfianzas rápidamente y de manera directa: para divorciarte, te hace falta no sólo abogado, sino también procurador.
Recientemente nos ha ocurrido que un matrimonio que creía estar de acuerdo en los términos de su divorcio y en la forma de organizarse con su hijo menor nos realizó una primera consulta, inicialmente era el perfil de cliente que tiene un primo/vecino/amigo de amigo que sabe “de leyes”, pero, como suele ser habitual, la situación que nos planteaban distaba bastante de lo que la situación aconsejaba, y nuestra actuación a tiempo, evitó un auténtico desastre. Diremos antes que nada, que la pregunta de este post va dirigida únicamente a divorcios de mutuo acuerdo, en los que, como sabes, los cónyuges de forma conjunta acuerdan poner fin a su relación y regular sus relaciones con los hijos menores, si los hubiera.
En nuestra opinión, contar con la ayuda de un abogado a la hora de afrontar un divorcio es fundamental, ya que nuestro principal objetivo, siempre va a ser el lograr que la situación se solucione de la manera más rápida y económica para tus intereses, y que los episodios y momentos desagradables sean cuantos menos, mejor. Tu abogado además, debe ser especialista en derecho de familia, y estar habituado a solventar este tipo de situaciones a diario.
¿Por qué González-Moncayo Abogados?
Porque nosotros, no sólo nos encargamos de darte soluciones, nos encargamos de O-RIEN-TAR-TE, si si, has leído bien. En al menos, 7 de cada 10 divorcios en los que intervenimos, las partes no saben realmente qué significa cada uno de los conceptos que forman parte de su divorcio, y sobretodo, qué consecuencias tiene que no los cumplas. Además de ayudarte a entenderlo todo, es muy importante anticiparse a lo que puede ocurrir, comunicarse de la mejor manera, y tener unas nociones básicas de negociación.
Cuando un cliente nos consulta sobre si es necesario que cada parte tenga su abogado, normalmente, y al ser un divorcio de mutuo acuerdo, en el que no se discute nada, nuestro consejo es que el abogado de ambos cónyuges sea el mismo, pero en ocasiones, no ocurre así. En los divorcios ante notario, también resulta necesario contar con un abogado, ya que, aunque las cuestiones que se tratan son puramente económicas, consideramos que para actuar mejor asesorado, es imprescindible contar con un abogado.
Relacionado en parte con nuestra función en este tipo de procedimientos, habrás oído hablar de otra manera de divorciarse, la mediación. La mediación no es más que la labor de MEDIAR entre dos personas, para lograr una solución que satisfaga a ambos. En Derecho de Familia, la figura de la mediación consiste en llevar a cabo una serie de reuniones entre ambas partes, con la figura de un mediador, que orienta a las partes sobre los aspectos del divorcio que pueden ser objeto de debate, y trata de buscar un acuerdo. Cuando este acuerdo se alcanza, se plasma en un acta, lo que equivaldría a un convenio regulador en el ámbito judicial. Pero en este punto hay que hacer un matiz importante, cuando ese acta de mediación se firma, para que despliegue sus efectos, es obligatorio, que se homologue judicialmente. Por ejemplo, y esto nos ocurrió la semana pasada, matrimonio que se divorcia de mutuo acuerdo por la vía de la mediación, establecen sus medidas, firman su acta, pero nunca lo pasan por Juzgado. Más de 2 años después, el padre no está cumpliendo la obligación de pago de pensión de alimentos desde hace más de 15 meses, ¿puede la madre hacer algo?, pues por duro e injusto que pueda parecer, NO. Al no haber homologado ese acta de mediación en un Juzgado, no se puede reclamar ningún incumplimiento. En cambio, si en su momento hubieran estado asesorados correctamente, ese acta se habría llevado al Juzgado de inmediato, y habría desplegado los efectos exactamente igual que un convenio regulador.
Como el anterior, vemos ejemplos con frecuencia en el que por entender las partes que no les hace falta un abogado, es peor el remedio que la enfermedad.
Por último, somos plenamente conscientes de la transformación digital que afecta a nuestra profesión, y en general, a la sociedad, por ello en González-Moncayo Abogados estamos comprometidos con darte el máximo contenido e información de valor, por eso tendrás en nuestra página web un artículo semanal sobre divorcios y cuestiones relacionadas con divorcios para resolver tus dudas e inquietudes. Próximamente te presentaremos más novedades que estamos seguros que no te van a dejar indiferente.